Leyendas de mi pueblo. La maldición.
Hoy no queda nada del viejo monasterio de Sta María de la Blanca, como si el tiempo hubiese intentado borrar su huella para tapar el recuerdo de los sucesos del pasado. Era este, un monasterio de monjas cistercienses de buen tamaño, aunque austero, como corresponde a la regla de San Benito, situado entre las Plazas de la Iglesia y la del Baile y del que algunos aún recordamos, como último vestigio ahora desaparecido, las arcadas ciegas en el antiguo lienzo de casas y el arco de paso entre ambas plazas. El convento se fundó en 1160 bajo el reinado de Sancho el Sabio y Doña Sancha de Castilla. Tuvo su época de esplendor con el abadiato de la condesa Doña Blanca, hija bastarda del último representante de la dinastía Jimena, Sancho el Fuerte, cuando la condesa se convirtió en dueña de un señorío al que estaban sujetos todos los vecinos en cuestión de arriendos, compraventas y otros menesteres. En el siglo XIV, el monasterio recibió donaciones del rey Teobaldo II, para el ...
Eres un crack!!
ResponderEliminarYa te echaba en falta!
ResponderEliminarSiempre me sorprendes!Artista!